EL PODER Y LA PRUDENCIA
“Hace mucho tiempo, Inglaterra estaba gobernada por un rey
llamado Canuto. Estaba rodeado de aduladores que le decían:
-Eres el hombre más grande que jamás vivió, decía alguien.
-Oh rey, nunca puede haber otro más poderoso que tú, añadía
otro.
- No hay nada que no puedas hacer, le manifestaba un tercero.
El rey era un hombre sensato y se cansó de tantas tonterías.
Y un día que caminaba por la costa decidió dar una lección a todos aquellos
cortesanos.
- Así que,
según vosotros, ¿todas las cosas me obedecen?, preguntó el rey.
- Por supuesto
que sí, respondieron ellos.
- Traed mi
silla y colocarla en la orilla del mar.
Así hicieron y Canuto se sentó junto al mar. Y añadió:
- Veo que se
acerca la marea. ¿Pensáis que se detendrá si se lo ordeno?
- Uno de ellos
afirmó: Imparte la orden, gran rey, y la marea obedecerá.
- El rey habló:
Mar te ordeno que no avances más.
Pero el agua y las olas avanzaban y mojaban los pies del rey.
El agua avanzó más y mojó enteramente los pies del rey y su manto. Entonces
Canuto se dirigió a los cortesanos y les dijo: Parece que no tengo tanto poder
como queréis hacer creer. Hoy habéis aprendido algo. Ya veis que no soy tan
poderoso como decís.
Los funcionarios y cortesanos agacharon la cabeza sintiéndose
ridículos”.
El poder, igual que la autoridad, tienen competencias y
también límites.
(Adaptación de un texto de James Baldwim).
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La autoridad es el ejercicio de la sabiduría. Portadora de
ella son los padres, entre otros. Sabiduría es un don que se adquiere por el
conocimiento de las cosas y la experiencia. Con ella se enriquece la vida de
los hijos y de los subordinados. Tener junto a nosotros a una persona que goza
de la sabiduría, del discernimiento entre el bien y el mal, es un premioso
beneficio a nuestra persona.
Con la sabiduría se ejecuta el buen juicio en las palabras,
los actos, los negocios, los planes y la educación.
La prudencia, más aún la del político y del gobernante, es un
claro ejercicio de la sabiduría. Todo hombre público debería examinarse con
frecuencia sobre el grado que posee de ella.