martes, 29 de octubre de 2019

LA GRANDEZA DE LA FAMILIA. 2



Hay una educación intencional y no intencional. Estamos en educación no intencional, cuando se educa sin una intención de educar. En este caso, sin darnos cuenta se esparce por cada rincón del hogar una forma de ser y actuar. Normalmente, los padres educan casi siempre, no intencionalmente, en el sentido de reflexionar antes, sino intuitivamente.
Cuestiones a evitar en la educación familiar:
Padres preocupados: ansiosos, perfeccionistas, exigentes en prohibiciones y parcos en permisos.
Padres despreocupados: indiferentes, fríos, hostiles.
Padres que abdican por debilidad, comodidad o inmadurez.
Padres autoritarios o paternalistas.
Los hábitos de trabajo de los hijos.
La tarde de los hijos es un momento educativo de gran relieve.
Las tareas hay que considerarlas como algo sagrado. Se hacen.
Tarea es también el estudio y la lectura. Ambos deben ser diarios.
Misión de los padres es conocer cómo razonan los hijos. Si les cuesta retener. Si tienen facilidad para expresarse. Si estudian de forma activa: con lápiz y papel y si son ordenados.
Los chicos necesitan a padres positivos, que animan y muestran clara satisfacción cuando ellos  cumplen con sus obligaciones, siguen de cerca los estudios y progresos de cada hijo.
Importancia del guía.
El guía presenta señales, normas, tradiciones, … Es el  que sabe.
Si no hay guía, la conducta carece de dirección y se vuelve más instintiva.
No podemos tener complejos de buen guía. Al contrario, complejo de superioridad de serlo. Lo que tiene que hacer un padre y una madre, no lo puede suplir nadie. Nadie tiene su categoría, ni la relación afectiva e íntima que ellos tienen con cada hijo.
Los progresos en la educación.
En la educación y en la enseñanza, todo avance en la excelencia es una dichosa ventura. Es un avance que irá acompañado del amor por la educación, por la formación del carácter y por unas asignaturas.
ESTIMULACIÓN DE LOS PUNTOS FUERTES
Dicen Canfield y Wells: “El camino  más efectivo para estimular a una persona a desarrollar todo su potencial es concentrarse en sus punto fuertes. Desgraciadamente, muchos niños y adolescentes no encuentran nada positivo y valioso en sí mismos. En general, las personas tienen más conciencia de sus limitaciones que de sus capacidades y recursos.”
PADRES MODERNOS.
Es moderno conocer cómo piensan los hijos y sus amigos.
Es moderno conocer críticamente las actuales corrientes del pensamiento y de la cultura.
Es moderno rechazar lo superficial y vano.



LA AUTORIDAD. 4


Una perspectiva, a no olvidar, es la de estimular a los hijos a que analicen el grado de confianza que poseen y darles motivos para que crezca y se desarrolle más la que ya tienen. Los hijos que confían en sus propias posibilidades y en las ayudas que pueden recibir de sus padres, irán caminando en un avance continuado. Ya dijimos que el respeto y la confianza favorecen el desarrollo de su personalidad.

Otro aspecto con alta relación con la autoridad es que los hijos perciban que son valiosos, muy valiosos para sus padres. Y crearles la necesidad de vivir según sus convicciones.

Me parece necesario finalizar transcribiendo el cuento chino, anónimo del siglo XIII, “El dilema de la cuerda de arco”:

“Un arquero preparaba arcos con los materiales que le daban, con las cuerdas que le traían. De eso vivía y con eso disfrutaba porque eso sabía hacer.
En ocasiones las cuerdas que le llegaban, siempre todas del mismo material, eran flojas; no había forma de tensarlas; aplicándoles el mismo tratamiento que a todas, o no reaccionaban o se destensaban poco después.
En esos momentos el arquero se afanaba, pues si tiraba demasiado, la cuerda se rompía y ya nunca más serviría; si por el contrario nada le hacía, la cuerda por sí sola, desde luego no se movía.
Pasó un anciano junto al taller un día, y el arquero le contó su porfía: ¿Qué hacer con esas cuerdas que desperdiciar tampoco quería? ¿Qué decir al amo de todas ellas, suministrador único de la buena y floja mercancía?; ¿que sólo en el trabajo cómodo ocuparse quería? ¿Que su destreza ante lo inesperado se rendía? Si así fuera, el amo pensaría que quien de cuerda difícil nada sabía, a la cuerda buena menos partido que el posible sacaría, y quizá el suministro terminara, algún día.
El anciano respondió al arquero: tú has dicho la solución y si así lo ves, podrás con tu habilidad aplicarla. Si, como a otras, al llegarte la cuerda deficiente, la tensas enseguida con firmeza, estará enseguida deseando aflojarse o se romperá dolorida en un instante. Si por el contrario antes de apretar la preparas y la observas esperando su momento, aunque tarde años ese acontecimiento, deben durar tus esfuerzos de mantenimiento, sin tensar inoportuno y con sufrimiento; aunque la cuerda parezca indiferente, esa es la situación aparente, que ella se empapa del calor de tus cuidados y del tino de tu mente.
Si así actúas verás, que antes de lo que piensas ocurre que la floja cuerda se anima y al estirarla, se mantiene firme en la tensión debida y más elástica que otras por la ciencia en su propia fibra recibida; firmeza y elasticidad permitirán después, a su arco orgulloso, lanzar más lejos los dardos en que se empeñe. Y así el trabajo donde ahora desesperas, será para ti la ocupación más querida.

Esperar, por ello, esta es la solución. Pero esperar haciendo; y para ello necesitas al esperar no ocultar tu corazón”.

viernes, 25 de octubre de 2019

BARCELONA



En aquella tarde de domingo, Josefa y Daniel invitaron a sus vecinos Sara y Sergio a que bajasen a su casa a tomar café y pastas. Era una tarde agradable para los dos matrimonios. Pero cuando se acercó la hora del telediario, Daniel preguntó: ¿queréis que veamos las noticias? Todos asintieron y Daniel encendió el aparato. Comenzaron las noticias y guardaron silencio… Hasta que el presentador anunció: Esta mañana se han enfrentado dos grupos vandálicos en Barcelona y como consecuencia de la refiega realizada con piedras, adoquines y todo objeto contundente, un joven ha perdido un ojo y otro un testículo.

-Pero ¿por qué esa pelea?, preguntó Sara.

-Dicen, que unos quieren una bandera y los contrarios otra distinta, repuso Sergio, su esposo.

-Otros hablan de que la causa es el idioma, añadió Josefa.

-También hay algunos que piensan que es que España les roba, expuso Daniel.

-Es inconcebible, pronunció Sergio. Cuando estudiábamos, aprendimos que los primitivos pueblos, los de  Cro-Magnon se llamaban, se peleaban porque una tribu cercana les había matado un ciervo que pacía en sus campos. La pelea de entonces también era con grandes pedruscos. Habiendo pasado ya tantos siglos se podían haber inventado otros métodos de peleas, digo yo.

-Por un lado vivimos en un gran progreso, dijo Josefa, somos capaces de ir a la Luna; por otro el retraso es espantoso: no somos capaces de solucionar un problema de banderas o de idiomas.

-Los adelantos que cantaba don Hilarión, se referían a cosas materiales, pero en las conductas seguimos pareciendonos a los cromañones, continuó hablando Sergio.

- El hombre del siglo XXI continúa cayendo en los mismos hoyos que los del siglo XV antes de Cristo: somos celosos, codiciosos, soberbios y además no hemos aprendido a saber evitar herir los sentimientos de otros, expuso Sara.

-Pues, ya nos valdría tener más tacto al hablar y al hacer, añadió Daniel.

-¡Qué raros somos los seres humanos!, ¿no? Preguntó Josefa.

Y cuando se dieron cuenta, el telediario se había acabado.

viernes, 18 de octubre de 2019

LA ALEGRÍA


Un audaz escritor contemporáneo escribe en su libro: “Razones para la alegría”: “Si tuviera que pedirle a Dios un don, uno solo, un regalo celeste, le pediría que me concediese el supremo arte de la sonrisa”.
Nos alegran y emocionan las estupendas calificaciones de un hijo, un trabajo profesional bien hecho, la Primera Comunión de un hijo; que toda la familia se acuerde de nuestro cumpleaños, la victoria de nuestro equipo, una estupendísima noticia que nos han dado; que nos hablen bien de la conducta y comportamiento ejemplar de un hijo o de un nieto. Diariamente nos alegra que nuestra esposa, accediese a casarse con nosotros (pudiera no haber aceptado), la boda de una hija…
Pues nos tiene que alegrar y mucho, que somos personas íntegras. Hay que remarcar que la alegría cristiana nace de que somos hijos de Dios.
La alegría nace y se desarrolla en el corazón humilde y confiado, del que tiene fe. Y además es fruto del amor. El enamorado es una persona alegre.
Eugene Boylan es un escritor enamorado de la verdadera alegría y con pasión, escribe: “Todas las vidas de los santos están llenas de alegría; un júbilo que en el mundo no conoce, un júbilo que surge en el corazón del hombre y brota como un río, rebosando y anegando todo su ser hasta que el alma entona un cántico de júbilo. Solamente los que aman a Dios pueden comprender la belleza de la Novena Sinfonía”.
Sin embargo, la alegría es compatible con el dolor, el sufrimiento. Con las contrariedades de la jornada. Con las angustias y tribulaciones. La fe y la esperanza (no el apoyo en nuestras propias fuerzas), son fuentes de nuestra alegría.
Una anécdota: Un campesino encuentra en el campo un polluelo de águila. Lo lleva a su casa y lo encierra en una jaula junto a sus gallinas. Pasados unos meses comprueba el error cometido. Saca el águila y la lleva a un monte y allí le grita: “¡Abre tus alas y vuela!”. ¡Eres la reina de los cielos! ¡No pintas nada en la tierra! “¡Abre tus alas y vuela!”. Algo parecido podemos decirle a un cristiano. “¡Sal a la calle, al mundo y conquístalo!”.
La calle, las plazas, los estadios, los campos, los jardines, los lugares de recreo, las fábricas, las oficinas, los mercados, los colegios, los hogares: son tus ambientes.
Y, ¿cómo se logra eso? Las virtudes y el buen ejemplo de la vida son tus armas.
Un apunte más de un personaje alegre: “¿Cómo vivimos nuestro ser Iglesia? ¿Somos piedras vivas o somos, por así decirlo, piedras cansadas, aburridas, indiferentes? ¿Habéis visto que feo es ver a un cristiano cansado, aburrido, indiferente? Un cristiano así no funciona; el cristiano debe ser vivo, alegre de ser cristiano; de vivir esta belleza, de formar parte del Pueblo de Dios que es la Iglesia”. (Papa Francisco: audiencia del 26-06-2013).


viernes, 4 de octubre de 2019

LA AUTORIDAD 3



Los padres deben comprender la singularidad de cada hijo y trabajar en añadirle aquellos valores fundamentales para la vida, que observe que le faltan al muchacho.

Misión pues, importante de los padres es proporcionar tal educación al hijo, y tal convicción de que la autoridad es elemento imprescindible en su vida, que es la gran ayuda mediante la cual el hijo podrá dejar años después una huella en su ambiente, en su posible futura familia y en la sociedad. En el fondo, que el hijo pueda ver en su padre el timonel en el que confiar para surcar felizmente los mares de su vida. Es asunto relevante: cada hijo deberá ir tomando conciencia mientras es educado, y también una vez finalizada, que él está en la vida y en el mundo para transformarlo un poco o mucho, depende de varias condiciones y probabilidades.

En fin, que la autoridad debe ser madura y justa y se ejerce como un acto de servicio a la familia, y en especial a los hijos. Su objetivo, juntamente con otros muchos factores educativos, es enseñar a hacer el bien. Para ello, que la familia tenga un mínimo de normas es dese luego, un elemento positivo para la relación familiar.  Debe tenerse en cuenta que el paternalismo es un mal ejercicio de la autoridad y debe evitarse. La autoridad descansa fundamentalmente en la presencia de los padres. Ya lo hemos considerado anteriormente: los padres que funcionan bien, que tienen prestigio y saben arbitrar correctamente normas y flexibilidad, no suelen tener problemas con la autoridad. Saben ejercerla sin crear tiranteces ni angustias.

Pero tener en cuenta que los hijos harán cosas sin consultar; en otros asuntos informarán a sus padres y en unos terceros, acudirán a sus progenitores solicitando autorización para algo. Es el mundo de los hijos, no lo olvidemos. Anticiparse, ante la tarea o encargo que se les vaya a encomendar, es ayudarles para que se organicen. Por ejemplo:
-         ¿Cómo se va a hacer?
-         ¿Dónde se va a hacer?
-         ¿Cuándo se va a hacer?
-         ¿Quién lo va a hacer?
Las normas que sean pocas, importantes y conocidas por los hijos. “Así que es lógico que existan sanciones cuando alguna no se cumple. Sanciones positivas para ayudar a los hijos a cumplir mejor. No es el momento de hablar de premios y castigos. Sin embargo, sería conveniente destacar dos puntos importantes:

1.     Estamos continuamente sancionando el comportamiento de nuestros hijos, dando un beso, sonriendo, hablando con ellos, mostrando interés en lo que están haciendo. La sanción no solo consiste en: “que no salgas a jugar”, “que no veas la televisión”, etc.
2.     Cada hijo necesita una sanción distinta. Pueden existir unas sanciones, muy pocas, para todos los hijos. La gran mayoría se adaptarán según las necesidades del hijo. Como dice Aristóteles: “es tan injusto tratar a iguales desigualmente como tratar igualmente a desiguales”. [1]
Ya lo hemos dicho también, aceptar al hijo tal y como es y tratar de comprenderle. La relación de Tobit con su hijo Tobías, puede ayudar a dar luces y orientación. Los padres ayudarán además a que el hijo se acepte como es. En este aspecto, es de gran valor ayudarle a que reflexione sobre las cualidades positivas que posee, y otras que puede adquirir si las trabaja siguiendo un pequeño plan que él mismo puede confeccionar. Este plan y trabajo incidirán muy positivamente en su autoestima, luego merece la pena volcarse ello por el buen bien que produce.


[1][1][1] David Isaacs: Relaciones familiares padres-hijos. Nota técnica.