El
profesor buscará siempre en sus explicaciones la claridad, la sencillez y
el orden para facilitar a los alumnos el
correcto aprendizaje de los conocimientos. Las explicaciones del profesor son
más asequibles y eficaces si estimulan la participación de los alumnos.
En los
primeros años pocos minutos ya que es difícil mantener la atención de los niños
durante más tiempo. En 5º y en 6º, pueden ser ya períodos de 15 ó 25 min. Pasado ese tiempo conviene alternarlas con
técnicas motivadoras y con técnicas de aprendizaje algunas de las cuales se
detallan a continuación:
n Actividades manuales: dibujar, recortar,
colorear, trabajos en cuadernos, etc.
n Lecturas silenciosas y dirigidas.
n Elaboración de mapas, esquemas, cuadros
sinópticos, mapas conceptuales, resúmenes, etc.
n Salidas a la pizarra con el objetivo de
estimular al alumno y darle confianza en sí mismo.
En Secundaria y Bachillerato, el tiempo de explicación tenderá a ser algo mayor,
pero sin excederse y con tendencia siempre a que los alumnos participen y hacerles pensar.
EL PROFESOR – MEDIADOR
n FUNCIONES:
n CREADOR
DE BUEN AMBIENTE EN EL AULA.
n HACER
PENSAR.
n UTILIZAR
ESTRATEGIAS VARIADAS.
n SER
GUÍA EN LA CLASE.
n FOMENTAR
EL ÉXITO.
n ANIMAR
A VENCER RETOS.
n ESTIMULAR
LOS TRABAJOS EN EQUIPOS.
ORIENTACIÓN PERSONAL DE LOS ALUMNOS
n El profesor tiene ser capaz de citar
los puntos fuertes y débiles de cada alumno en relación con cada materia que él
enseña. Por ejemplo:
n Que no sabe analizar, pero sabe
sintetizar; que tiene dificultades específicas en la lectura y en la expresión
oral; que falla frecuentemente en el cálculo mental; que le cuesta la
memorización; que tiene un alto desarrollo de la capacidad de observación, etc.
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