lunes, 26 de febrero de 2018

RESPONSABILIDADES EN CASA


Sonia y Tony son hermanos de 16 y 14 años respectivamente. Durante los largos años de la infancia, sus padres han estado pendientes de educarles en las cuestiones fundamentales. Ahora en plena adolescencia, al igual que la mayoría de los chicos de este período, se sienten incomprendidos y el centro de todo. Se encuentran por lo tanto en esos momentos de cambios, de nuevos intereses, de inseguridad y de fuerte discrepancia con los padres. Es decir, con un cerebro aún en vías de formación, saturación hormonal, nuevos estímulos y repetidas fuerzas instintivas, o sea, en pleno  desarrollo biológico, social, emocional y cognitivo. Y con un incesante aparecer de pensamientos ilógicos en su transcurrir diario, por eso decía Gracián que el hombre para ser del todo perfecto, “necesitaría tener una chimenea en la coronilla por donde se pudiesen exhalar los muchos humos que continuamente están evaporando del cerebro”.
A esas situaciones más o menos comunes a todos, añaden Sonia y Tony una larga relación de comportamientos que deterioran la vida del hogar: frascos abiertos, dejar el lavabo sin limpiar después de usarlo, vasos y latas  de bebidas que aparecen en el salón, en los dormitorios, en todas partes, ropa descolocada, peines en lugares inverosímiles, cuadernos y libros de textos que cuando se buscan cuesta encontrarlos... Pero eso sí, pasan horas ante el televisor, yendo de un canal a otro, para después tener que aplicar el teorema de Pitágoras para poder encontrar el mando que sabe Dios dónde lo han dejado. En fin, una gran cantidad de abandono en el cuidado de pequeños detalles que perturban la convivencia y la tranquilidad y sosiego de sus padres.

Viven despreocupados de las tareas domésticas sin colaborar en su realización  y sin tener en cuenta a los demás de su hogar. Ciertamente las ocupaciones de la casa puede ser algo molesto para los adolescentes, sin embargo, es necesario que las tengan por un sentido de servicio, de autodisciplina y de mejor integración en la vida familiar.

Pero hay muchos Sonia y Tony que con actitudes muy similares desorganizan la vida familiar, en cuestiones de orden menor, si se quiere, pero que alteran la serenidad que debería reinar en el entorno familiar.
¿Qué hacer ante esas situaciones?
Desde luego hay que educarles, especialmente en dos ámbitos: en el servicio a los demás y en la generosidad, porque pasados los años, si no han conseguido incorporar esas dos actitudes en su vida, no serán felices, no podrán construir una familia dichosa y si deciden casarse, harán muy penosa la vida de su pareja.
Los padres tienen que arreglar esa situación, para lo cual deberán conocer una serie de recursos educativos.
Hablaremos de algunos.
1.        La biblioterapia. Que es una técnica educativa mediante el uso de materiales de lectura que ayudan a los jóvenes a comprender mejor los problemas. Los personajes de los libros ofrecen soluciones a problemas y situaciones, además de que el lector libera tensiones emocionales con la identificación con los personajes. Muchísimas novelas de la literatura juvenil ofrecen valores en este sentido.
2.        El proyecto de desarrollo personal.  Con el que se puede conseguir y reforzar habilidades de saber escuchar, de ser capaz de seguir instrucciones concretas, de saber compartir, de ser capaz de pedir perdón, de autocontrolarse ante una frustración y por supuesto, de ser colaboradores en las tareas del hogar.
3.        Un plan personal de acción. Es un  programa expuesto por la Orientadora Repetto Talavera. Es una planificación de las acciones, con los pasos necesarios para llegar al éxito. El método consiste en entregar al adolescente la Hoja de Trabajo que se describe a continuación. Él tendrá que elegir  el aspecto que desea trabajar y completar la hoja como tarea que mediante su cumplimiento le irá conduciendo a conseguir la meta elegida.
Hoja de Trabajo.
A. Aspecto elegido a trabajar:
B. ¿Qué podría impedirme alcanzar esa meta?
 * Falta de capacidad o de los conocimientos necesarios.
 * Carezco de la motivación y el interés precisos.              
 * Temor al fracaso.                                                                                           
 * Realmente el aspecto elegido es demasiado difícil para alcanzarlo.           
* Otras razones pueden ser: 
C. ¿Qué podría hacer para evitar que los factores mencionados me impidan alcanzar el aspecto elegido:
D. ¿Quién puede ayudarme?
E. ¿Qué cosas positivas podrían suceder si yo consigo ese aspecto?
F. ¿Qué cosas podrían suceder si yo no alcanzo la meta elegida?
G. ¿Cuáles son los primeros pasos que podría dar para alcanzar mi meta?

H. ¿Qué más debo hacer si deseo tener éxito? 

lunes, 19 de febrero de 2018

OTRAS AYUDAS PARA LA EDUCACIÓN



 El reforzamiento. Se considera reforzamiento todo aquello que pueda ayudarles a llevar un buen gobierno de su vida. Probablemente el mejor reforzamiento es el ejemplo de sus padres.
Las conductas de los adolescentes que reciben un reforzamiento, se hacen más frecuentes, sólidas y terminan originando hábitos. Así que los padres y educadores pueden reforzar las conductas deseadas.
El reforzamiento es desde luego un método enormemente eficaz como instrumento educativo. Lo podemos resumir así:
Positivo. Ante una conducta loable, padres y educadores la premian y entonces favorecen que aquella continúe realizándose.
Negativo. Ante una conducta negativa, padres o educadores corrigen y el adolescente puede que en el futuro obre mejor para evitar la corrección.
Extinción. Los padres o educadores dejan de prestar atención al que obra mal. Él se da cuenta que no le hacen caso, solamente le atienden cuando obra bien, en consecuencia, la conducta negativa comenzará a remitir.
Control de estímulos. Hay estímulos positivos, pero también los hay negativos. Una manera de reforzar la conducta es llevar mediante un gráfico un control de los estímulos negativos o pensamientos irracionales que inciden desfavorablemente en sus estudios, en la relación familiar o social, etc.

La grandeza de la vida familiar. Pero creo que nada es tan valioso y educativo como la propia fuerza de la vida familiar. La fuerza de la vida familiar, actúa preventivamente, es decir, antes de la aparición de la adolescencia, ya habrán puesto los padres una serie de medios para que los hijos colaboren en las tareas del hogar. De la misma manera que es mucho mejor y hay posibilidades de éxito, si se hace una medicina preventiva ante posibles enfermedades –muy bien lo saben los médicos y las madres de los bebés, con las famosas vacunas, por ejemplo-, de igual modo, es conveniente que los padres actúen cuando el chico o la chica está en la edad infantil. Es sin duda la fuerza de una vida familiar unida, el recurso más potente que puede encontrarse para ayudar al adolescente. Ningún otro es comparable, en primer lugar porque las relaciones familiares tienen una fuerza afectiva que otros recursos no tienen o lo poseen en un grado muy inferior. Cuando en una familia hay buena comunicación, se tiene un sistema de valores, hay presencia de los padres y actitud de ayuda a los hijos y los progenitores, en especial el padre, ofrecen un papel definido, allí, en ese ambiente, se está bien.
Por último, en este capítulo como en tantos otros referidos a la educación, no se puede olvidar la importancia de ejercer una autoridad justa y estable.

LECTURAS JUVENILES.
A modo de ejemplo, véase una relación de lecturas juveniles que ayudan a mejorar en responsabilidad y educan la voluntad:
•         BEAU GESTE de P. C. Wren. Ed. Juventud. Novela de escenarios reales en la que se muestra el heroísmo de tres hermanos, soldados de la Legión Extranjera en tierras africanas.
•         UN CAPITÁN DE QUINCE AÑOS de Julio Verne. Ed. S.M. Novela de aventuras en la que un joven grumete tiene que hacerse cargo de un barco y su tripulación.
•         IVANHOE de Walter Scott. Ed. Aguilar. Historia de Ivanhoe, desde que es desterrado por su padre hasta que logra casarse con Lady Rowena. Sucesión de episodios caballerescos y sentimentales en los tiempos de la Inglaterra de Juan sin Tierra y Ricardo Corazón de León.
•         EL OTRO ÁRBOL DE GUERNICA de Luis de Castresana. Ed. Prensa Española. Obra de gran delicadeza y finura de estilo que relata la vida de unos niños vizcaínos durante los tres años de la guerra española en que fueron enviados a Bélgica.
•         EL DÉCIMO CLANDESTINO de Giovanni Guareschi. Ed. Planeta. Es un conjunto de 17 relatos breves que manifiestan con realismo y humor la vida en los barrios obreros de grandes ciudades,
•         VUELO NOCTURNO de A. Saint-Exupéry. Ed. G.P. Deliciosa novela de aventuras que cuenta la historia de una compañía de navegación aérea, cuando los aviadores trataban de establecer el servicio comercial de transporte aéreo.
•         EL SOLDADOS QUE NOS ENSEÑÓ A HABLAR  de Mª Teresa León. Ed. Altalema. Biografía novelada de Cervantes. Recoge los hitos más destacados de su vida, entrelazando sus aventuras como militar y las circunstancias de su vida familiar.
•         EL SEÑOR NATURAL de Laszlo Possuth. Ed. Caralt. Biografía novelada de D. Juan de Austria.
•         ANA Y SU ORQUESTA de Joseph Joffo. Ed. Grijalbo., Biografía novelada de la madre del autor, una valiente y animosa judía rusa, a quien el relato nos presenta en su infancia y juventud. La protagonista y su familia salen de Rusia huyendo de la persecución antisemita buscando un lugar definitivo donde vivir hasta llegar a París.
•         PÚRPURA Y NEGRO.  J. P. Gallagher. Ed. Palabra. Recuerdos en forma novelada de Monseñor O´Flaherty, quien desde su destino en el Vaticano dedicó sus esfuerzos a salvar personas buscadas por los nazis durante las Segunda Guerra Mundial.
•         EL ORIENTE EN LLAMAS de Louis Wohl. Ed. Palabra. Biografía novelada de S. Francisco Javier

* UN SACO DE CANICAS. 
* LOS CHICOS DEL FERROCARRIL. de Edith Nesbit. Siruela. 

viernes, 16 de febrero de 2018

EL APOYO DE LA FAMILIA EN LOS ESTUDIOS DE LOS HIJOS



1. Los padres deben comprobar frecuentemente, que los hijos están dedicando un tiempo diario al estudio de acuerdo con el curso escolar:
   * Cursos últimos de Primaria: alrededor de 1 hora diaria.
   * Secundaria, 1º Ciclo: alrededor de 2 horas diarias.
   * Secundaria, 2º Ciclo: alrededor de 2.5 horas diarias.
   * Bachillerato: alrededor de 3.5 horas diarias.

2. Debe procurarse que los chicos no intenten estudiar una lección con medios que les faciliten distracciones: TV puesta; estudiar con música; habitación próxima al teléfono, etc.

3. Premiar el esfuerzo de cada hijo en la realización de su plan diario de trabajo.

4. Proporcionar al chico un ambiente adecuado para el estudio. Conocer el estado de orden, silencio, tranquilidad, etc., de su habitación.

5. Conocer con asiduidad qué dicen los profesores sobre el estudio del chico.

6. Señalarle a los hijos metas a corto plazo para mejorar el rendimiento, de común acuerdo con sus profesores.

7. La cooperación de los padres en la elaboración de un plan de trabajo y un horario escrito es muy beneficioso para el estudiante.

8. Se debe atender a que no aparezca fatiga mental en el estudiante. Para ello deben cuidarse una serie de factores:

* Reposo y sueño adecuado según la edad.
* Evitar un exceso de cansancio físico.
* Que las preocupaciones familiares no lleguen a crear ansiedad.
* Vida ordenada en los días ordinarios y en los fines de semana.
* Que el número de horas de trabajo del chico sean las convenientes según su edad y curso.
* Que haya a lo largo del tiempo de estudio las pausas adecuadas, que relajen y proporcionen un pequeño reposo y  distracción.

9. Aprovechar las épocas de exámenes para colaborar con el estudiante con pequeños recursos, preguntarle algún tema, facilitarle más orden, ...


martes, 13 de febrero de 2018

LA MEJORA DE LA MEMORIA


1. Para aprender debes procurar:
• COMPRENDER lo que el autor quiere decir con el texto que trabajas.
• FIJAR las ideas principales, relacionarlas con otras ya conocidas ordenadas y clasificadas y repetir varias veces esas ideas para grabarlas en la mente con intensidad.
• REFLEXIONAR al final de un rato de estudio preguntándote:
    - ¿Qué debo recordar preferentemente?
    - ¿En qué orden debo recordarlo?
• RETENER las ideas ya aprendidas. Para ello es necesario el repaso durante breves periodos de tiempo en los días siguientes, tratando de realizar una elaboración mental u oral de lo que se debe memorizar.
2. Un orden conveniente al comenzar el estudio es empezar con algo fácil y que guste; minutos después se pasará a aquello que es más difícil y cuesta.
(Algo parecido a la vida deportiva: 1º, el precalentamiento; después, el partido).
3. Un buen método de estudio consta de las siguientes fases:
A.- Lectura atenta del tema.
B.- Segunda lectura fijándose en los términos importantes. Preparando la Unidad con el conjunto de operaciones personales que ayudarán a su asimilación y retención: subrayado, destacar ideas o términos-claves, esquema, clasificación, etc.
C.- Ir asociando los nuevos conceptos que aprendemos con otros ya conocidos.
D.- Repasar-retener los párrafos que se van asimilando, fijando ideas y términos fundamentales. La repetición de lo aprendido (el repaso), consigue una sólida fijación de los contenidos.
E.- Resumir lo aprendido con brevedad, claridad y precisión.
4. Se ayuda a la memoria, redactando ideas y siendo capaz de proponerse preguntas a sí mismo; escribiendo un resumen del conjunto estudiado, etc.
5. La mesa de trabajo debe estar despejada de objetos que pueden distraer.

6. El libro de texto hay que convertirlo en una herramienta de trabajo, en el que aparezcan notas, subrayados, ideas-recordatorios, ideas-asociativas, etc.

viernes, 9 de febrero de 2018

LA PARTICIPACIÓN DE LOS PADRES EN LA EDUCACIÓN. III


En días anteriores comentábamos  que la tarde de los hijos es una acción educativa más. Para ello es imprescindible un poco de organización que tiene que contar con un horario, un plan de trabajo y hacer vivir el plan organizado.
Como es un punto de especial relieve que tanto hijos como padres tenemos que saber valorar, me parece conveniente narrar en este tercer artículo, sobre la participación de los padres en la educación, una experiencia muy interesante en este sentido.
Se produjo en la década de los ochenta en Estados Unidos. Grupos de indochinos recién llegados que no hablaban bien el inglés, matriculan a sus hijos en escuelas del nuevo país. Parten con muchas desventajas, además del inglés, viven en pisos pequeños donde no era fácil estudiar, la mayoría la componían familias numerosas con pocos recursos económicos y poco tiempo para el estudio personal. Pero los resultados de los exámenes de los jóvenes indochinos era un enigma. En las áreas verbales, incluido el inglés, obtenían calificaciones casi iguales a la media norteamericana y mejores calificaciones en matemáticas y ciencias. ¿Dónde estaba la explicación? En la tarde familiar de esos grupos. La tarde típica de esos refugiados, según un estudio de la Universidad de Michigan, era más o menos de esta manera: “Después de la cena, se quita la mesa y empiezan los deberes. Los hijos e hijas mayores ayudan a los más pequeños. Durante esos ratos se aprende muchísimo: normas, hábitos, actitudes, esperanzas, y también el contenido de las materias. Tal participación demostraba como una familia numerosa puede animar y ayudar a todos a tener éxito académico”.  Los padres solían leer cosas a los hijos y los lazos afectivos entre padres e hijos y el refuerzo en los valores culturales hacían el resto.
O sea, que un chico de Primaria, Secundaria, Bachillerato,  sobre el que no haya un seguimiento y control en casa, es muy probable que se venga abajo en rendimiento académico.
Conviene señalar cómo lograr que las notas escolares tengan un significado objetivo y útil para educar a los hijos.
El argentino Laforucade establece los significados verdaderos  que pueden tener las notas escolares.  Veamos  una síntesis.

QUÉ DEBEN SIGNIFICAR LAS NOTAS.
1. Una información valiosa para saber en qué materia sus hijos necesitan ayuda especial en casa.
2. Un indicador que puede ser considerado útil para estimular lo que el niño sabe hacer y no insistir demasiado sobre lo que es incapaz de realizar.
3. Uno de tantos sistemas de comunicación con la escuela.

EL AMBIENTE FAMILIAR.
Los padres son principalmente los creadores de un ambiente agradable, constructivo y positivo en la vida familiar.
Lo consiguen fundamentalmente mediante una actitud de educadores permanentes. En los padres no existe ni un solo momento en el que no eduquemos.
En el hogar, se educa cuando queremos (educación intencional), y cuando no queremos. Sin darnos cuenta, se esparce por cada rincón del hogar, una forma de ser y actuar.
Cada hogar, cada familia, establece un estilo educativo. Los padres tienen que creer en un estilo educativo para sus hijos. Creer es importante, pero es igualmente importante, saber ser un buen transmisor de lo que se cree. Hay que tener argumentos para saber transmitir.
Este estar continuamente educando y desarrollando un ambiente, llevará a los padres:
n a un actitud de apertura, tanto hacía sí mismo (formación personal para crecer como educadores), como hacia sus hijos, para ser comprensivos, exigentes, flexibles, tolerantes,
n a conocer el mundo de los hijos que no es exactamente igual que el nuestro.
Por lo tanto, se reduce a conocer más para educar más y mejor, porque solamente educan los que tienen algo que aportar.
Los padres son por lo tanto guías.
El guía presenta: señales, normas, tradiciones, cosas ocultas para quien le sigue, conocimiento del mundo y de la vida. El guía es una fuente de luz.  De él procede un atractivo singular y fuerte que arrastra y conduce a otros hacia el bien.
El guía  es palabra y modelo. El padre es palabra y modelo porque es proyección, futuro, para los chicos. El guía favorece la obediencia por prestigio y cariño principalmente.
Si no hay guía, la conducta de los chicos carece de dirección y se vuelve más instintiva.
Y lo instintivo es un mundo de contradicciones y alteraciones: en unos momentos son ejemplares; en otros, no hay quien los soporte.
La labor de guía del padre y de la madre, nadie puede suplirla. Nadie tiene su categoría, ni la relación afectiva e íntima que ellos tienen con el hijo.
Muchos conocimientos se adquieren en la vida: aprender a conducir; una carrera universitaria o profesional,  …pero los significados fundamentales de la vida, se obtienen en la familia, en ese ambiente: significados de confianza, amor, aceptación del otro, lealtad, respeto, solidaridad, etc.
De la misma manera que los modelos sociales imperfectos originan disfunciones y problemas humanos, al revés también ocurre lo contrario. Porque cuando un individuo, unos padres, funcionan bien, transmiten categorías de gran valor a los demás.
ACTITUDES DE LOS PADRES QUE AYUDAN A CREAR UN CÁLIDO AMBIENTE EDUCATIVO:
            Son:
-          El ejercicio de una autoridad justa y estable.
-          El cultivo de la generosidad.
-          El fomento del autodominio.
-          La amabilidad en las relaciones.
-          Un claro sentido de modernidad.
-     El tiempo y la paciencia.




lunes, 5 de febrero de 2018

LA ASIMILACIÓN DE LOS CONTENIDOS DE APRENDIZAJE


LA DOSIFICACIÓN EN EL APRENDIZAJE
Muy conveniente, especialmente cuando se presenta a los estudiantes una nueva información. La generalidad de los chicos asimilan los contenidos de acuerdo a unos ritmos, que difieren de unos a otros, pero prácticamente todos retienen mejor aquello que estructuran en su cerebro en distintas fases o dosis.

TAREAS FINALES DE REMEMORIZACIÓN.
Son tareas de lápiz y papel que realizadas por los alumnos al finalizar una Unidad, ayudan a la evocación. Como siempre, las propone el profesor y solicita le sean entregadas. Veamos algunas propuestas por Lewis:

A.- Ficha metodológica.
La realizan los alumnos en un folio u hoja de su carpeta de apuntes de acuerdo con este esquema:
       1. TITULO DEL TEMA.
       2. DIVISIÓN DEL TEMA. ESTRUCTURACIÓN.
       3. IDEAS CAPITALES.
       4. DATOS Y CONCEPTOS QUE MEJORAN LA COMPRENSIÓN DEL TEMA.
       5. VOCABULARIO BÁSICO QUE HA APARECIDO EN LA UNIDAD.
       6. SÍNTESIS: qué recuerdo del Tema.

 Cuaderno-Agenda de Recuerdos.
Igualmente, la realizan los alumnos en folio o en hoja de su carpeta de apuntes.  Diferencia notable con la anterior es que esta técnica la realizan al final del día y una sola vez. 
   Su esquema es el siguiente:
       1. QUÉ HE APRENDIDO ESTA MAÑANA EN CLASE.
        - He aprendido que Colón descubrió América.
        - Después, obtener el denominador común de las fracciones, mediante el M.C.M.
            etc.
       2. DURANTE LA TARDE HE APRENDIDO. Etc.

 Preparación de un simulacro.
El propio alumno, según va estudiando un tema, va elaborando una serie de preguntas. Preguntas que él mismo tiene que saber contestar durante su propio estudio personal.
También puede hacerse algo similar, pero en vez de con preguntas, aprendiendo con ejemplos para cada concepto. El chico busca y elabora los suyos, la mayoría los obtendrá de la vida real, e igualmente los entrega al profesor, clasificados según los objetivos del tema.


viernes, 2 de febrero de 2018

LA PARTICIPACIÓN DE LOS PADRES EN LA EDUCACIÓN (2)


Continuando con el apasionante apartado sobre qué resuelven y aportan los padres en la educación de los hijos, hay que añadir a lo ya expuesto, que tampoco suele ser buen estudiante el hijo consumista. El consumista con el dinero de los padres no es fácil que sea buen estudiante, porque estudiar requiere voluntad y esfuerzo y él ya tiene muchas cosas sin esa voluntad y ese esfuerzo. De lo que se deduce que la política de austeridad económica con los hijos es necesaria, o sea, un poquito menos de móviles, de videojuegos. etc. etc.
Más cuestiones corresponden aún a los padres, me refiero a la formación de la conciencia. Porque en la conciencia hay una dinámica de lucha es posible educarla, perfeccionarla. Asunto no tan difícil cuando el educador, padre y madre en este caso, es un individuo lleno de amor, de comprensión, engendrador de confianza y consecuentemente exigente. Es así como se sientan las más firmes bases para que la conciencia se forme objetivamente bien.
Todo educador sabe que la conciencia se moldea si se atiende a los instintos, se forma la inteligencia, se cultiva la afectividad, se fortalece la voluntad y se practica el esfuerzo.
En la formación de la conciencia, el niño debe conocer que hay instintos buenos y malos, cómo actúan y la trascendencia que pueden tener en su persona.  Igualmente deben conocer los valores y el beneficio y enriquecimiento personal que proporcionan. Todo esto es más importante para los niños que lo vean plasmado en una persona concreta, que el que los conozcan mediante una explicación.
En resumen, que si los padres funcionamos bien transmitimos categorías de gran valor para los demás. Por ello es necesaria la presencia estable de adultos que sirvan de “modelos” y proporcionen apoyo, ánimo, comprensión y dirección a cada chico.
Y, ¿cómo debe ser la relación de la familia con el centro educativo?
Lo primero es que esa relación tiene que existir, es decir, hay que buscarla, quererla. No podemos quedarnos en la información breve y escrita de un boletín de calificaciones. La dificultad del tiempo hay que solucionarla, exigiéndose y exigiendo calidad en esa relación. Hay que visitar a los profesores de los hijos, es especial al tutor. En esas entrevistas, dos o tres como mínimo en cada curso escolar, será conveniente tratar:
A. Rendimiento en los estudios.
B. Metas educativas. Bien definidas, buscando que sean formadoras del carácter.
C. Convivencia en casa y en el colegio. Comportamiento.
D.Trazar planes de mejora para periodos de tiempo determinados. Planes confeccionados con optimismo, con esperanza, con alegría.
Hay una cuestión más, que parece que debemos abordar por su alta repercusión en el objetivo que tenemos planteado: que los hijos puedan estudiar. Me refiero a los hábitos de trabajo y su apoyo en casa. O lo que es lo mismo, cómo desarrollar la capacidad de esfuerzo.
Las tareas en casa tienen que valer para conseguir hábitos, para desarrollar  facultades mentales, como la memoria, la observación, la asociación, la asimilación, la comprensión y para adquirir destrezas en la realización de los trabajos.
Lo primero que deben hacer los padres es conocer cómo es la forma de aprender que tienen los hijos. Deben conocer:
·         Cómo razonan.
·         Si les cuesta retener.
·         Si tienen facilidad para expresarse.
·         Si estudian de forma activa, con lápiz y papel.
·         Si son ordenados.
Los padres motivan para que realicen las tareas si son positivos, si manifiestan satisfacción por el trabajo bien hecho del chaval, cuando siguen de cerca sus estudios, que les dará además la posibilidad de conocerlos mejor y comprenderles., si valoran más el esfuerzo que los resultados, cuando son creadores de un estilo deportivo ante el trabajo: estilo de lucha, pelea, paciencia y constancia.
La tarde de los hijos es una acción educativa más. Para ello es imprescindible un poco de organización que tiene que contar con un horario, un plan de trabajo y hacer vivir el plan organizado.
El horario es conveniente que sea fijo, escrito, con organización y con  las tareas bien distribuidas. Hay que hacerles conocer que con la repetición del horario, día a día, se adquiere un hábito y así cada vez costará menos. El primer logro del horario es comenzar el trabajo a la hora prevista. Ni un  minuto después a ser posible. El horario es necesario porque el estudio y el trabajo ocupan tiempo, como decía Unamuno: “Al aforismo de “el saber no ocupa lugar”- lo cual en rigor es falso- pongo siempre este otro: “pero aprender ocupa tiempo”.  El chico tendrá que adaptarse a ese horario.
Decía que ayuda mucho tener cada día un plan de trabajo. Claro y concreto para saber en cada momento lo que hay que hacer. El plan de trabajo debe abarcar al menos, cinco días semanales. En ese plan aparecerá también el tiempo que se dedicará al repaso de las lecciones.  Si está bien confeccionado contará con una previsión para la preparación de los controles y pruebas.

Pero desde luego lo más importante del horario y del plan preparado es cumplirlos. Un excelente horario o plan de trabajo que no se cumple, no sirve para nada.  A lo largo de los días pueden aparecer razones, que no son razones, para posponerlo. No es esto lo que hay que hacer.  Lo normal es hacerlo y valorar el esfuerzo puesto, procurando que cada media hora de trabajo se conviertan realmente en treinta minutos de trabajo. Es decir, en los tiempos de trabajo se trabaja y en los de descanso, se descansa. Es cierto que eso enseña a vivir con espíritu de sacrificio, pero ese es el camino. En fin que el trabajo en casa tiene un valor instrumental y educativo muy importante en cuanto contribuye a aprender a trabajar en soledad, por propia cuenta, sin dependencia.