viernes, 30 de diciembre de 2016

LA EDUCACIÓN AFECTIVO-SEXUAL


Aspectos a tener en cuenta: 
1.        ¿Qué desean saber los jóvenes? Diferencias entre deseo, atracción sexual y amor.
2.        Es importante lograr cierto control de los sentimientos/control de la pasión sexual.  Y Ser ordenado/a.  En el cerebro debe estar  el control, de la sexualidad.
3.        Una información biológica, no es algo neutro, porque hay otros aspectos que se ignoran.
4.        El concepto que tengamos del ser humano es importante ante una educación afectivo-sexual. ¿Somos unos metros de piel rellenada de células?  Muchos anuncios nos dan una visión del hombre y del mundo afectivo bastante pobre, además de falso. Véase algunos:

“Date un gusto o un respiro”.                            ”Dedícate un minuto y un capricho”.
“ Tú te lo mereces”.                                           “Alégrate la vida”.
“Vive a tope”.                                                    “Sácale todo su jugo al instante”.

Este tipo de anuncios, ¿están considerando al hombre como persona con inteligencia, voluntad, libertad, sensibilidad y afectividad?
5.        Los emparejamientos tempranos. ¿Qué producen: más placer; más riesgos; más problemas…?  Saber esperar tiene su premio.
6.        Elegir. Elegir es renunciar. En muchas ocasiones, es renunciar a otras cosas buenas. Es necesario conocer las limitaciones del otro/a para embarcarse en una relación con mayor conocimiento.
7.        La pornografía y las revistas frívolas o del corazón o rosas, según estudios realizados, producen un adelanto en las relaciones sexuales.
8.     En USA, los jóvenes que asisten semanalmente a oficios religiosos –no solamente a la misa, pueden ser oficios de otras religiones-, tienen menos actividad sexual.
9.        El amor es consecuencia de la afectividad, la inteligencia y la voluntad. El equilibrio entre las tres es fundamental para el nacimiento y desarrollo del amor.
10.      La afinidad en la pareja facilita una vida serena, sosegada y feliz.  Tener un proyecto común propicia mucho la vida de la pareja. Dice el refrán: “Para el barco que sale sin rumbo, todos los vientos son contrarios”.
11.      ¿Para qué el noviazgo?:
-          Para dialogar con el otro/a durante un tiempo.
-          Para conocerse.
-          Para mirarse.
-          Para mirar juntos en la misma dirección.
-          Para divertirse juntos.
-          Para madurar el amor cultivando la sensibilidad, la generosidad, la fortaleza, la afectividad y la ternura.
-          Para crecer juntos y dar cabida en ese crecimiento al Señor.
12.      La unión física en el matrimonio. En ella se produce un total abandono del yo en el otro. Es la donación recíproca del uno en el otro. Esa donación bien efectuada, supone que los sensual y lo espiritual se unen en ese momento. Y por eso, porque hubo una donación espiritual, el esposo tiene más facilidad para comprender a la esposa e identificarse con sus aspiraciones más profundas. Exactamente lo mismo le ocurre a la esposa respecto al esposo.
13.      La situación actual. “La hoja de parra ha experimentado un desplazamiento”, escribe un autor americano. Antes cubría los genitales, ahora cubre el rostro de las personas. De tal  manera que una chica se puede estar acostando con un chico, sin saber con quién se acuesta, es todo un desconocido para ella, porque no conoce su carácter, su temperamento, sus ideales, sus principios vitales… El fin de la sexualidad es el amor. El amor es una relación de entrega, de darse al otro/a. Si no hay entrega permanente y esto sólo se da en el matrimonio,  es una relación “de uso”.
14.      El SIDA. Aparece por el consumo de drogas, la actividad homosexual, la promiscuidad, o por la relación cambiante con diversas personas (nuevas  parejas).
15.      PREVENCIÓN DEL SIDA. Según el CD de Atlanta.
•         Retrasar el inicio de  las relaciones sexuales.
•         Relación monógama: de uno con una.
•         El preservativo. Puede reducir el riesgo, pero no elimina toda la posibilidad de transmisión.  Empresas fabricadoras: dan un 3% como ineficaces.
•         Mensajes que reciben los jóvenes: “Todos somos iguales ante el sida”. No es cierto, todos no somos iguales.
•         Otro mensaje: “El preservativo es eficaz”. Tampoco es cierto. Los propios fabricantes aceptan un tanto por ciento de fracaso.
16.      El VIRUS DEL PAPILLOMA HUMANO. Se produce por contagio.
Una Revista médica, dice:
Sin preservativo, contagio de un 89%.
Con preservativo, contagio de un 38%.



jueves, 22 de diciembre de 2016

CAMINO DE BELÉN



            María y José dejan Nazaret. Emprenden el camino hacia Belén. Unas tres jornadas de caminar. María va recogida, medita en el muy próximo Nacimiento de su Hijo. José, respeta su recogimiento y le acompaña con el silencio. Los ángeles, Gabriel también, con una presencia no visible, permanecen junto a ellos.
            María medita en la Encarnación del Verbo. A su mente vuelve una y otra vez lo ocurrido hace nueve meses, momento en el  que el ángel Gabriel le anunció el mensaje de la Santísima Trinidad con relación a su maternidad.
María se detiene en considerar la humillación a la que se somete el Verbo tomando carne humana para la salvación de toda la humanidad. Y piensa y habla con el Creador, sobre el gran amor de Dios, que es la causa del anonadamiento del Verbo.
De vez en cuando, mientras continúa ascendiendo hacia las tierras de Judá, el Niño se mueve en su seno virginal.
Sin saberlo José, sin saberlo María, sin embargo, hay momentos en los que sus pensamientos siempre en un silencio contemplativo, confluyen, y los dos meditan y exclaman interiormente: ¡Ven Señor Jesús!
La primera jornada finaliza y buscan un lugar en el que descansar.
Al día siguiente, la segunda jornada de este caminar único en la historia. María  dedica las horas a contemplar y meditar las palabras del ángel Gabriel: será llamado Hijo del Altísimo. Su trono será el de David y su reino en la casa de Jacob no tendrá fin.
José continúa respetando con su silencio, la oración de su esposa. Hace frío.
Están en el mediodía mientras atraviesan Samaria. Cerca está la ciudad de Sicar. Lo mejor es acercarse al pozo y descansar y tomar algunos alimentos. Así lo hacen. José saca agua del pozo. Bebe y da de beber a María. Después, también beberá el burrito. Apagadas la sed, José vuelve a sacar más agua, con la que se lava la cara y en ese momento, nota algo extraño en su rostro y en todo su cuerpo. Su corazón se acelera. Comen y descansan. José sentado y apoyado sobre un árbol, se adormece. Y sueña. Minutos después, ya despierto, dice a María: He tenido un sueño.
Su esposa responde: ¿Qué te ha dicho el ángel?
-          ¿Cómo sabes que en el sueño ha venido un ángel?
-          Lo he visto, añade María.
-          Dice que el agua con la que me he lavado es la gracia.
Continúan el camino hasta que el sol comienza a declinar. Y nuevamente, como en la noche anterior, buscan un lugar resguardado en el que pasar la noche.
Al día siguiente, tercera y última jornada. María la dedica recitar  a meditar el Magníficat.
Llevan tres horas de caminar y ya divisan Jerusalén. Pero no se van a detener en la capital. Continuarán con dirección a Belén. Dos horas más y habrán llegado.
El cielo se ha cubierto de abundantes nubes. El frío es helador. Comienzan a ver las primeras casas de la ciudad de David.
Enseguida hay que buscar alojamiento. La ciudad está superpoblada. El empadronamiento ha dado lugar a esta invasión de belenitas que vuelven a su origen para cumplir con el mandato de César Augusto. No hay forma de encontrar donde pernoctar.
Un conocido de José le aconseja salir de la ciudad y pasar la noche en una de las cuevas del exterior. Al final, es lo que hacen. En una de ellas se instalan.
José comprueba que el  frío ha aumentado. Deja a María en la cueva mientras sale a buscar leña. Un poco de fuego hará que la noche sea menos cruda.
Minutos después regresa llevando un hatillo de leña y al entrar en la Cueva, ve a María con el Niño en sus brazos. Jesús  acaba de nacer.
José se arrodilla ante el Niño, le besa y le adora.
Yo soy un pobre pastor, sólo tengo un miserable establo, un pequeño  pesebre, algunas pajas; os lo ofrezco todo, dignaos aceptar este pobre tugurio. Apresúrate, Jesús, aquí tienes mi corazón; mi alma es pobre y está desnuda de virtud, las pajas de mis innumerables imperfecciones te herirán, te harán llorar; pero, oh mi Señor, ¿qué queréis? Esto es lo poco que tengo. Tu pobreza me conmueve, me enternece, me arranca lágrimas; pero no sé ofrecerte otra cosa mejor. Jesús, embellece mi alma con tu presencia, adórnala con tus gracias, quema estas pajas y transfórmalas en suave lecho para tu cuerpo santísimo”.  Oración del seminarista Ángel José Roncalli (S. Juan XXIII), el 24 de diciembre de 1902. 

¡FELIZ NAVIDAD 2016!                                                          JGC.

lunes, 19 de diciembre de 2016

DIÁLOGO DE DOS BEBÉS GEMELOS


        
En su carta semanal, el arzobispo de Oviedo, monseñor Jesús Sanz Montes, habla de las cosas buenas que ofrece internet y las nuevas tecnologías y para ello comparte con todos sus fieles una bonita historia de un escritor húngaro que tiene como protagonistas a dos bebés gemelos que están todavía en el vientre de su madre. El diálogo entre ellos es el mismo que tantos millones de seres humanos se hacen sobre Dios y la eternidad. Acaba explicando qué es Dios y a su vez con una fina ironía muestra los argumentos de los que no creen en nada.

Esta es la carta del arzobispo Sanz Montes publicada en la web de la Diócesis de Oviedo: Diálogos intrauterinos.

Hace unos días yo recibí un correo electrónico de alguien conocido y apreciado. Me mandaba algo que “había pescado” en la red. Y lo quiso compartir conmigo. Me pareció tan bello, tan simpático y tan inteligente, que lo quiero también yo compartir. Se trata del diálogo de dos bebés gemelos que esperan en el seno de su mamá el día del nacimiento. Ellos hablan de ese día alumbrador, pero su ingenioso debate es el mismo debate que nos hacemos sobre Dios o la eternidad. Helo aquí:

«En el vientre de una mamá había dos bebés. Uno preguntó al otro: –¿Tu crees en la vida después del parto?
El otro respondió: –“Claro que sí. Tiene que haber algo después del parto. Tal vez estamos aquí para prepararnos para lo que vendrá más tarde”.
–“Tonterías”, dice el primero. “No hay vida después del parto. ¿Qué clase de vida sería esa?”.
El segundo dice: –“No lo sé, pero habrá más luz que la hay aquí. Tal vez podremos caminar con nuestras propias piernas y comer con nuestras bocas. Tal vez tendremos otros sentidos, que no podemos entender ahora”.
El primero contestó: –“Eso es un absurdo. Caminar es imposible. Y ¿comer con la boca?¡Ridículo! El cordón umbilical nos nutre y nos da todo lo demás que necesitamos. El cordón umbilical es demasiado corto. La vida después del parto es imposible”. El segundo insistió: –“Bueno, yo pienso que hay algo y tal vez sea diferente de lo que hay aquí. Tal vez ya no necesitemos de este tubo físico”.
El primero contesto: –“Tonterías. Además, de haber realmente vida después del parto, entonces ¿por qué nadie jamás regresó de allá? El parto es el fin de la vida y en el post parto no hay nada más allá de lo oscuro, silencio y olvido. Él no nos llevará a ningún lugar.
–“Bueno, yo no lo sé”, dice el segundo “pero con seguridad vamos a encontrarnos con Mamá y ella nos cuidará”.
El primero respondió: –“Mamá… ¿tu realmente crees en Mamá? Eso es ridículo. Si Mamá existe, entonces, ¿dónde está ella ahora?”.
El segundo dice: –“Ella está alrededor nuestro. Estamos cercados por ella. De ella, nosotros somos. Es en ella que vivimos. Sin Ella, este mundo no sería y no podría existir”.
Dice el primero: –“Bueno, yo no puedo verla, entonces, es lógico que ella no existe”. El segundo le responde a eso: –“A veces, cuando tú estás en silencio si te concentras y realmente escuchas, tu podrás percibir su presencia y escuchar su voz amorosa allá arriba”».

Su autor es un escritor húngaro. Es una preciosa manera de explicar a Dios y la eternidad con la misma lucidez o el mismo absurdo de tantos de nuestros argumentos y conversaciones. Tiene toda la ironía que deja a la intemperie a quienes creen firmemente que no creen en nada ni en nadie. Pero, se sepa o no, se acepte o no, no podemos dejar de esperar a Dios, y Él viene a nuestro encuentro.
+ Fr. Jesús Sanz Montes, ofm                                       9 de diciembre de 2016.
         Arzobispo de Oviedo


viernes, 16 de diciembre de 2016

EDUCACIÓN EN LA FORTALEZA


            Probablemente en todos los periodos, prehistóricos o históricos de la vida del ser humano, aparecieron momentos duros en su vida. Si nos fijamos en la formación de Roma, especialmente desde la época de Julio César hasta el día de hoy, fueron sucediéndose  tiempos difíciles con otros de algo de más sosiego. La actual que se vive en el mundo,  también lo es. Por eso estos tiempos necesitan de hombres y mujeres fuertes. Efectivamente, fortaleza es lo que precisa esta época.

            Solamente mediante una educación en la fortaleza, podemos aspirar a la excelencia en gran cantidad de aspectos de la vida de este comenzado siglo.

            Seguramente que nos podemos acordar de Pericles, Demóstenes, Cicerón, o por acercarnos a nuestro siglo, al Parlamento húngaro que recientemente nos ha ofrecido un ejemplo de fortaleza y sentido común con la aprobación de su nueva Constitución, por no recurrir a la memoria de Konrad Adenauer (Canciller de Alemania después de la Segunda Guerra Mundial), Alcide di Gasperi (Ministro y Presidente del Consejo de Ministros de Italia) y Robert Schuman (varias veces ministro de Francia).Tres grandes políticos de la segunda mitad del siglo XX,  a los que se considera fundadores de la Europa actual.

                        La fortaleza que deseamos nos impulsará a amar el mundo que tenemos, también lo defectuoso que iremos encontrando, pero con el compromiso de transformarlo. ¿Cómo? Con la aplicación de la vida a lo bueno, a lo justo y a lo verdadero. Amar a este mundo, es entregarse con ardor a la conquista del bien.

            No viene mal, que alguna vez echemos la mirada a los valores grecolatinos que han venido siendo pilares básicos de una buena educación. Millán Puelles ofrecía un apunte interesante: “la diferencia entre el ser educado y el no educado, decía, es semejante a la que existe entre lo perfecto y lo imperfecto”. Y Richard Hermstein y Charles Murray afirman: la educación debe lograr algo más que pericia técnica. Debe tratarse de una educación que estimule la sabiduría y la virtud a través del ideal de la persona educada. Poco cambiará hasta que los educadores no asuman de nuevo este aspecto.

            Todos los años, una vez finalizado el curso, las autoridades educativas  conceden los Premios extraordinarios de Bachillerato a un numeroso  grupo de jóvenes. Otras instituciones, premio de  Reconocimiento a los alumnos que han conseguido la excelencia. En ninguno de esos casos, esos chicos y chicas han merecido tales distinciones debido solamente a un excelente cociente intelectual, que seguro que lo tienen. Junto a tal capacidad, en todos ellos ha brillado notablemente la fortaleza que han aplicado a sus estudios y trabajos. Pues bien, recordémoslo una vez más: con la fortaleza no se nace, se adquiere por educación.

            Hemos conocido épocas en las que  los valores educativos procedían de la tradición cristiana. Eran la defensa y promoción de la dignidad humana, del valor de la razón, la libertad y la verdad, entre otros. Eran elementos colaboradores a la pluralidad de un país o de una sociedad. La pluralidad es positiva, sin ella no es posible la libertad, ni la educación. Y no olvidemos, que educar es introducir  a una persona en la realidad y se llega  a la realidad a través de la verdad. Es más, el hombre libre es el que se compromete con la verdad, como dice Carlo Caffarra: Somos un gran deseo (de justicia, de verdad, de amor…) cuya realización está confiada a nuestra libertad.

            Y todo ese panorama solamente la realizarán los hombres y mujeres fuertes. La fortaleza no es solamente la capacidad de resistir. Es también, la energía para proponer y lanzarse a realizar obras que contribuyan a mejorar este periodo difícil y duro en el que nos encontramos.

            Esto es lo que solicitamos a los educadores, especialmente a los padres, pero también a las autoridades civiles y eclesiásticas, a los medios de comunicación e incluso a las comunidades de vecinos, porque esos deseados hombres y mujeres fuertes, están arropados por todos esos ambientes. Luego, por favor, no se inhiban. Colaboren, trabajen, por el bien de la sociedad en la que nos encontramos. Y la mejor colaboración que necesitan los seres humanos del siglo XXI, es que ustedes sean coherentes con los principios básicos y también esenciales de la vida humana.


lunes, 12 de diciembre de 2016

HACIA EL MATRIMONIO



Los novios se preocupan demasiado del banquete y poco de prepararse: lo dicen el Papa y los obispos.

“La preparación próxima al matrimonio tiende a concentrarse en las invitaciones, la vestimenta, la fiesta y los innumerables detalles que consumen tanto el presupuesto como las energías y la alegría”.

“Los novios llegan agobiados y agotados al casamiento, en lugar de dedicar las mejores fuerzas a prepararse como pareja para el gran paso que van a dar juntos”.

Estas frases figuran en el mensaje de los obispos españoles para la Jornada de la Sagrada Familia de 2016. Pero las frases no son suyas, sino de la exhortación "Amoris Laetitia" del Papa Francisco.

Los obispos de la subdelegación de familia (Iceta, de Bilbao; Gil Hellín, de Burgos; Reig Pla, de Alcalá; Melgar, de Ciudad Real; Mazuelos, de Jerez; Escribano, de Logroño, y Aznárez, auxiliar en Pamplona) comparten ese diagnóstico.

Los festejos sociales para casarse se desean tan ostentosos y amplios que muchas veces los enamorados desisten en casarse: no porque no crean en el amor matrimonial, sino porque la fiesta social les desanima con sus costes.

Ante esta situación los obispos consideran “urgente” presentar de manera renovada “la profundidad, centralidad e importancia decisiva” de contraer matrimonio y ofrecer una adecuada formación a los seminaristas, sacerdotes y agentes de pastoral familiar, pero especialmente a los novios, quienes son “protagonistas de la apasionante aventura de responder generosamente a la vocación matrimonial”.

En esta propuesta los obispos piden que se acompañe a los novios durante el noviazgo pero también de manera especial en los primeros años después de la boda.

Los obispos también son conscientes de las dificultades que afrontan los jóvenes a la hora de decidir casarse como son “la falta de una vivienda digna o adecuada; la falta de derechos de los niños; la necesidad de mejorar la conciliación laboral y familiar; la dificultad de apreciar el don inmenso que supone toda vida humana o la búsqueda obsesiva de placer”.

Como respuesta a estas dificultades desde la Subcomisión de Familia y Vida invitan a las familias a acoger a quienes corren el riesgo de ser descartados o «caer en las orillas de la marginación y la exclusión” como pueden ser las madres adolescentes o solteras, los niños sin padres o personas con discapacidad.

En su carta los obispos también apuntan al “ritmo frenético de la sociedad” como uno de los problemas que afrontan los matrimonios ya que en muchas ocasiones, según apuntan, “falta tiempo para dialogar, para abrazarse sin prisa, para compartir proyectos, para escucharse, para mirarse, para valorarse, para fortalecer la relación. A veces, el problema es el ritmo frenético de la sociedad, o los tiempos que imponen los compromisos laborales”.

Ante las épocas de crisis que afrontan los matrimonios, consecuencia de la propia convivencia, de los hijos, de dificultades económicas o afectivas aconsejan un “acompañamiento personalizado y paciente por parte de la Iglesia”.
Publicado en “Religión en Libertad” el 30 de noviembre de 2016.


viernes, 9 de diciembre de 2016

DECÁLOGO PARA FORMAR DELINCUENTES



Un juez elabora un «Decálogo para formar delincuentes»; haga esto y su hijo acabará en la cárcel.

El juez Emilio Calatayud, que goza de gran prestigio y predicamento en el mundo judicial, ha elaborado un "Decálogo para formar delincuentes" para alertar a los padres de lo que no deben hacer si no quieren tener un hijo que acabe en prisión.

Emilio Calatayud, que es juez de menores de Granada (España), señala en su blog que "he juzgado ya a cerca de 17.000 menores, que se dice pronto. Pues si me piden que haga un balance diré lo que siempre digo: la mayoría no eran delincuentes. Habían cometido delitos pero no eran delincuentes. Entre esos 17.000 chavales había una treintena de asesinos o homicidas, un dato que demuestra que los casos más graves son muy pocos".

En el portal Aleteia he recogido este interesante decálogo el 3 de diciembre de 2016.

"Decálogo para formar delincuentes", por Emilio Calatayud:

1. Comience desde la infancia dando a su hijo todo lo que le pida, así crecerá convencido de que el mundo entero le pertenece.
2. No le dé ninguna educación espiritual. Espere que alcance la mayoría de edad para que pueda decidir libremente.
3. Cuando diga palabrotas, riaselas. Esto le animará a hacer más cosas graciosas.
4. No le regañe nunca ni le diga que está mal algo de lo que hace. Podría crearle complejo de culpabilidad.
5. Recoja todo lo que él deja tirado: libros, zapatos, ropa, juguetes,… Hágaselo todo. Así se acostumbrará a cargar la responsabilidad sobre los demás.
6. Déjele leer todo lo que caiga en sus manos. Cuide de que sus platos, cubiertos y vasos estén esterilizados, pero no le importe que su mente se llene de basura.
7. Dispute y riña a menudo con su cónyuge en presencia del niño. Así no se sorprenderá ni le dolerá demasiado el día en que la familia quede destrozada para siempre.
8. Déle todo el dinero que quiera gastar. No vaya a sospechar que para disponer de dinero es necesario trabajar.
9. Satisfaga todos sus deseos, apetitos, comodidades y placeres. El sacrificio y la austeridad podrían producirle frustraciones.
10. Póngase de su parte en cualquier conflicto que tenga con sus profesores, vecinos, etc. Piense que todos ellos tienen prejuicios contra su hijo y que de verdad lo que quieren es fastidiarle.


Siga los pasos al pie de la letra, ¡pero luego no se asuste de los resultados!

lunes, 5 de diciembre de 2016

MIS HERMANAS LAS SANTAS



Mis hermanas las santas es el libro que escribe Colleen Carroll Campbell. Periodista que ha trabajado en prensa –New York Times, Washington Post, Firdt Things y América- y televisión –CNN, FOX, News, MSNBC, PBS y NPR-. Ha redactado numerosos discursos del presidente de EEUU, y ha sido productora ejecutiva de varios programas de EWTN. Conferenciante y escritora de varios libros aclamados por la crítica de su país. Vive con su familia cerca de Washington D. C.

Mis hermanas las santas  es una bella e inspiradora historia en la que Colleen nos va participando su encuentro con cuatro “teresas”, con Faustina y con su amiga María. Las dos primeras “teresas” las encuentra y conoce en la casa de sus padres. Y de esos encuentros va a partir una encantadora evolución de su vida, que se consolida cuando se enamora de John, su futuro marido, y con el que va a elaborar  una preciosa historia de amor y de lucha para encontrar el gran deseo matrimonial: tener hijos.

Como ella dice: Me presentaron a seis santas que me enseñaron el verdadero significado de la liberación.


Mis hermanas las santas, se lee con pasión, con un desmedido interés por encontrar minutos cada día, para embeberse en la ilusionante historia que Colleen propone. Con ella se participa de sus dudas, de sus aciertos y de la denodada lucha, muchas veces dramática, para lograr su gran meta: superar la infertilidad. En la publicación, la autora huye del feminismo laicista tanto como de la crítica antifeminista.

viernes, 2 de diciembre de 2016

TABLETAS Y MÓVILES DIFICULTAN EL APRENDIZAJE Y LA CONCENTRACIÓN



El debate sobre los efectos de la tecnología digital en los niños y adolescentes sigue concitando la atención de padres, educadores y expertos. El uso precoz de teléfonos móviles por parte de niños, el consumo abusivo de televisión y la introducción de tabletas y otras tecnologías como método educativo en los colegios está generando grandes controversias por las consecuencias que pueden tener sobre los más pequeños.

El psiquiatra alemán Manfred Spitzer es un experto sobre los efectos de la tecnología digital en la educación. Autor de entre otros libros como Demencia Digital (Ediciones B), es licenciado en Medicina, Psicología y Filosofía obteniendo a continuación una cátedra en Psiquiatría. Es además el director de la Clínica Psiquiátrica Universitaria de Ulm y el Centro de Transferencia de Conocimientos para las Neurociencias y el Aprendizaje.

En una entrevista en La Contra de La Vanguardia  se muestra muy contundente a la hora de asegurar que la Unión Europea debería prohibir estos aparatos en los colegios afirmando que perjudica el aprendizaje. Un análisis similar hace de móviles, televisión y videoconsolas:

-Usted habla de “demencia digital”: ¿Lleva móvil, doctor?
-Claro, porque soy mayor y sé usarlo lo justo, pero los niños no. Por eso no he dejado a mis hijos que lo tuvieran hasta los 18 años y hoy que tienen 20 me lo agradecen.
-Si sus hijos lo hubieran podido usar, ¿no serían hoy mejores profesionales?
-Hay evidencias científicas de que no. ¿Sabe por qué Bill Gates o Steve Jobs triunfaron?
-¿...?
-Porque tuvieron una excelente educación analógica que les preparó para ser innovadores.
-¿Con ordenadores en sus aulas, smartphones y iPads no hubieran sido aún mejores?
- Al contrario, el uso de esos aparatos retrasa la madurez de niños y adolescentes, y les impide concentrarse y aprender. Lo mejor para enseñar es leer, escribir, tomar notas, trabajar con el profesor: ¡eso es tecnología punta pedagógica!
-¿Por qué está tan seguro?
-Soy psiquiatra y neurocientífico y no doy opiniones, sino que he recogido pruebas durante años sobre los efectos de la introducción de la tecnología digital en las aulas que demuestran que perjudica al aprendizaje.
-¿No permiten dedicar el cerebro a otras tareas al liberarlo de la memoria rutinaria?
-El cerebro humano no es un disco duro que tiene una capacidad de almacenar X gigas de datos. No funciona así. Al contrario, si usted habla cinco lenguas, le será mucho más fácil aprender otra que a alguien que sólo sepa una.
-Cuanto más sabes, más fácil es aprender.
-Porque el cerebro no almacena datos, sino que los procesa. Es un conjunto de redes neuronales que, al conectarse, utilizan la información que está en ellas. Por eso, cuanto más cosas sepa usted, más puntos de conexión tiene la red de su cerebro y más fácil es establecer nuevos.
-Y, al contrario: cuanto más vacío está un cerebro, más cuesta llenarlo.
-Porque el cerebro funciona al revés que la memoria de un ordenador. Si usted sabe matemáticas, le será más fácil aprender física.
-¿Usar Google en el cole dificulta a los niños establecer esa base de aprendizaje?
-Si usted graba la clase del profesor directamente en un archivo de ordenador, su mente, se lo aseguro, no aprende nada, porque no establece conexiones. Si los chicos usan Google y lo que encuentran no establece relación con lo que ya sabían, tampoco aprenden nada. Necesitan que alguien vaya estructurando lo que aprenden.
-Pues invertimos fortunas en ordenadores escolares, iPads y tecnología digital.
-No sólo es tirar el dinero, sino que además es contraproducente. Los niños y adolescentes necesitan un buen educador sobre todo; toda esa tecnología sólo les distrae y les retrasa. Es triste ver niños smombies (zombies con smartphone) aislados de todo mirando su pantallita.
-Pero veo que usted lleva un ordenador.
-Porque soy un adulto y ya tengo una base que me dio una escuela en la que no tenía ordenadores, pero sí cuadernos, bolígrafos, pizarras y, sobre todo, un buen profesor que fue dándome estructuras sobre las que he ido construyendo lo que sé. Ahora sí que un ordenador y un smartphone me ayudan en tareas rutinarias siempre que no abuse de ellos.
-¿Veía usted la tele en casa de niño?
-No, y con mis hijos tampoco. Y me lo agradecen: mientras crecían leíamos juntos y comentábamos libros; hablábamos de mil cosas; compartíamos experiencias, y nos hemos ahorrado muchas horas de telebasura. La tele causa obesidad, depresión, insomnio...
-Hasta ahora sólo decían que estupidez.
-También. Mis hijos han crecido más sanos y listos sin televisión y yo, también.
-Algún informativo también instruye.
-En conjunto, la tele nos quita mucho más de lo que nos da. Le aseguro que en mi familia no la hemos echado de menos.
-¿Y la PlayStation?
-También hace perder el tiempo a los niños y les aísla de los demás. Lo triste es que en los colegios, las grandes multinacionales tecnológicas han conseguido que esa juguetería digital absurda se confunda con habilidades. Las corporaciones han ganado billones y nuestros jóvenes han perdido neuronas y oportunidades.
-Por ahora, esas habilidades digitales no dan a los jóvenes más empleo y sueldo.
-Porque en realidad son muy secundarias y sólo sirven por sí solas para trabajos de tercera y mal pagados. Forman consumidores, pero, a la hora de la verdad, las habilidades que sí se requieren en un buen empleo se adquieren interactuando con los demás; aprendiendo juntos: leyendo, escribiendo y trabajando en equipo.
-¿A qué edad la tecnología digital cree usted que deja de frenar el aprendizaje?
-Mire, un smartphone no es diferente de un automóvil: ¿y verdad que no pone al volante a su hijo de doce años? Pues con un móvil y el acceso a internet, sus hijos también pueden aprender a matar y exponerse a criminales de los cinco continentes. Pero, sobre todo, pueden perder mucho precioso tiempo de formación.
-Hoy mis alumnos en la universidad estaban tuiteando. ¿Les dejo o les digo algo?
-Yo a los míos los echo de mis clases si sacan el móvil. Si quieren tuitear, que se queden fuera.
-¿Y si son estudiantes multitarea?
-Hay experimentos sólidos que demuestran que ni siquiera las mujeres son multitarea. Nadie lo es. Con un buen profesor en clase y ganas de aprender, lo demás sobra.

Publicado el 24 de noviembre de 2016.